HOMBRES QUE DEJAN HUELLAS
Oscar Moscariello fue elegido como el ex Legislador más querido
Por Enrique Zemborain
Como es tradicional, al llegar Diciembre Perú160 convoca a los lectores a votar al compañero más querido del año y al Legislador que consideran el más respetuoso y laborioso. En ésta oportunidad, decidimos agregarle los ex legisladores (Mandato Cumplido).
Y el más votado fue…….Oscar Armando Moscariello, actual Embajador extraordinario y plenipotenciario de la República Argentina frente a la República Portuguesa.
Con una larga trayectoria política, en el año 2000 Moscariello fue electo legislador porteño por el Partido Demócrata Progresista.
Desde 2003 a 2007 tuvo a su cargo la Secretaría Administrativa de la Legislatura Porteña, desde donde modernizó el sistema administrativo legislativo, realizó la convocatoria a concursos internos para cargos de conducción en la planta permanente, y renovó el acceso informático de consulta legislativa creando el plan informático de Labor Parlamentaria. Es allí donde Moscariello logra un enorme reconocimiento y el cariño de los empleados de la casa.
Entre 2007 y 2009 fue Presidente de Bloque PRO.
Durante 2010 y 2011 ejerció como Vicepresidente 1º a/c de la Presidencia, siendo el moderador de las reuniones parlamentarias, y el primero en la línea sucesoria del Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, al encontrarse vacante la Vicejefatura del Gobierno de la Ciudad.
Nacido un 3 de Setiembre de 1952 en Arroyo Seco, Provincia de Santa Fe, Oscar Moscariello es Licenciado en Ciencia Política y Técnico en Comunicación y Opinión Pública.
Escribió varios libros como El camino de las leyes (2011), Manual del Comunero (2011), Ciudad y Justicia (2013) y Bolívar 1 (2014), todos ellos abocados al estudio y análisis de la institucionalidad y los procesos políticos de la Ciudad de Buenos Aires.
En su biografía, Oscar cuenta: “Nací en Arroyo Seco, Provincia de Santa Fe. Soy padre de dos hijas: Martina y Eugenia y abuelo de dos nietos, Juan y Felipe, a quienes amo con toda mi alma.
Crecí y me formé en el seno de una familia que se dedicó desde siempre al comercio y la actividad agropecuaria. Gracias a ellos comprendí que el esfuerzo y el trabajo son la llave que puede abrir cualquier puerta, por más cerrada que aparente estar.
Cursé la primaria en la Escuela Nacional Bernardino Rivadavia y la secundaria en la Escuela de Comercio Juan Bautista Alberdi. Tuve (y tengo) una pasión enorme por los autos y quise ser piloto de carreras. Pero un accidente en un taller mecánico me inclinó a ir por otro camino. Fue en ese momento cuando afloró mi inclinación por la literatura y las ciencias sociales, influenciado por mi abuelo materno quien me inculcó el amor por la lectura y el aprendizaje.
Tiempo después, comencé a militar en el Partido Demócrata Progresista inspirado por las ideas de don Lisandro de la Torre hasta que en el año 1985 tomé la decisión de venir a vivir a la Ciudad de Buenos Aires.
Me radiqué en Balvanera y comencé la carrera de Ciencia Política en la Universidad del Salvador, alternando el estudio con los viajes a mi provincia para visitar a mis afectos y desarrollar actividad política, siempre fiel a mis ideas”.