SOLICITAN INCLUIR EN LOS “PRECIOS CUIDADOS” ALIMENTOS SIN TACC
Al respecto de la medida, la diputada manifestó que “tanto los celiacos, como los diabéticos y aquellas personas con intolerancia a la lactosa, constituyen una parte de nuestra población que no puede quedar ajena al consumo cotidiano” y recordó que “en los tres casos, deben seguir dietas especiales con alimentos libres de los aditivos, gluten, azucares y lactosa, cuando el 80 % de los alimentos procesados e industrializados que se venden en las góndolas contiene algún tipo de componente que es nocivo para su salud”.
“Además de ser productos más caros precisamente por los cuidados y compuestos que deben contener, hay lugares de nuestro país donde incluso no es posible conseguirlos; es un verdadero problema que sean de difícil acceso y además costosos”, explicó y señaló que “pensando en la necesidad de tantas personas que deben seguir dietas alimenticias especiales debido a estas disfunciones y deben pagar hasta un 300% más caro los alimentos que únicamente pueden consumir, es que sugerimos al Poder Ejecutivo porteño y a los organismos intervinientes, tomen las acciones del caso, para incluir en el programa de Precios Cuidados a los productos que consumen regularmente tanto celíacos, como diabéticos e intolerantes a la lactosa”.
En los fundamentos de la medida, Vischi realizó una comparación de precios entre productos regulares encontrados en las principales cadenas de supermercados, y productos específicos para personas con esas patologías. Por ejemplo, un paquete de galletitas regular cuesta 24 pesos, mientras que las que no contienen azúcar agregada cuestan 40 pesos; en el caso del dulce de leche la diferencia es aún mayor, mientras un pote regular tiene un costo de 45 pesos, uno sin azúcar cuesta 100.
En el caso de los productos libres de gluten la diferencia también es notoria, ya que un paquete de salchichas regular tiene un valor de 35 pesos, mientras que uno sin TACC sale 100. Lo mismo ocurre con los productos deslactosados, dado que un litro de leche común tiene un costo de 25 pesos, mientras que el deslactosado asciende a 99 pesos.